A través del desarrollo de la siguiente experiencia como docentes, buscamos realizar una descripción y visibilizar aspectos para análisis sobre la modificación y complejidad de los procesos de enseñanza-aprendizaje en el contexto de emergencia sanitaria por Covid-19, que actualmente atraviesa a Argentina y a otros países del mundo.
Frente a este momento tan complejo, el distanciamiento social obligatorio, pone en cuestión las estrategias de enseñanza-aprendizaje tal y como han sido planteadas desde la creación de la educación formal, donde los/as estudiantes, concurren a un espacio físico (el establecimiento educativo) para poder adquirir y construir conocimientos.
Es así que desde el corriente año, las normativas impuestas por la emergencia, han implicado que los/as docentes adecuemos los espacios curriculares en los que nos desempeñamos, a las nuevas tecnologías, debiendo repensar no sólo las estrategias a implementar, si no la dificultad de acceso de algunos sujetos a los espacios virtuales.
En este sentido, las condiciones socioeconómicas presentes, demuestran que no todos los/as estudiantes poseen el acceso a servicios o tecnología que permita un proceso sostenido en el tiempo de educación virtual.
A su vez, identificamos la necesidad por parte de las instituciones educativas, de implementar mayores recursos institucionales para poder abordar dicha complejidad, fomentando mayor acompañamiento a la diversidad de situaciones que poseen los/as estudiantes.
Es a través de esta narración de nuestra experiencia, que desarrollamos el proceso de transformación, de una estructura presencial a una virtual, abarcando distintos medios y plataformas, y además pensando futuras estrategias, tendientes a promover la permanencia y el avance académico.