El presente trabajo intentará reconstruir una parte del tejido cultural de la década del ochenta en Argentina, a partir del abordaje de la producción documental. Dicho objetivo presupone analizar ciertos aspectos de la reorganización de las prácticas documentales, luego de la contracción que experimentó el campo cultural durante la última dictadura militar. Específicamente, se tratará de estudiar un momento de la producción documental sobre la que se tiene poco conocimiento, dado que no ha sido aún explorada por la historia del cine. En dicho marco, el presente trabajo intentará reponer el panorama general de la producción documental argentina correspondiente a la década del ochenta, concentrándose principalmente en la fase inicial del proceso de profesionalización del documentalista. Dicho trabajo implicará preguntarse por la forma en que el documental ha sido concebido, al igual que por sus principales modalidades de realización, circulación y exhibición; sin perder de vista las relaciones que ha mantenido con la televisión. El seguimiento de las principales reivindicaciones que rodearon al documental en dicho momento de reorganización, constituirá otro de los ejes privilegiados por el análisis. A través de un recorrido por ciertas zonas de la producción (forzadamente) independiente del documental de los años ochenta, esperamos poder acceder a las principales formas que asumieron las prácticas documentales antes de su institucionalización.