En estos tiempos de descoyuntamiento político e ideológico organizado, se torna un ejercicio ineludible el rastreo histórico y con ello, la vivificación de la memoria colectiva. Por ello, en este trabajo se someterán a comparación dos regímenes emergidos en épocas diferentes: el peronismo (las dos primeras presidencias) y el adolfismo en San Luis (instaurado desde 1983), considerado este último una prolongación del ideario político-partidario sustentado por el primero. El eje de la comparación se vertebrará en torno al análisis de las prácticas de adoctrinamiento en los ámbitos educativos formales y no formales, que tuvieron como finalidad la generación del pensamiento hegemónico. A partir de una lectura retrospectiva sobre el peronismo se pretende hacer visibles algunas líneas de continuidad que han habido entre aquél régimen y el adolfista, no por un hecho fortuito sino por el uso estratégico que el gobierno puntano y su caudillo emprendieran sobre distintos recursos de poder, entre los que se encuentra la educación. El reciclaje de viejas artimañas de persuasión y creación de la adulonería ha sido posible gracias a la des-historización de las prácticas y discursos sociales, el vaciamiento semántico de diversos conceptos, la cooptación de otros y la dictadura de la des-memoria. Resta aclarar que lejos se está de un posicionamiento historiográfico que estriba en una visión de la Historia como una infinita repetición de los acontecimientos en la que se niega la posibilidad del conflicto y la revolución. Se adhiere a la noción de Historia reticular caracterizada por la presencia del azar, la paradoja, la complejidad dada por las múltiples relaciones entre los hechos y el dinamismo presente en el despliegue de los mismos. Desde esta vertiente adquiere relevancia echar un vistazo sobre lo simbólico y particular o lo que en términos de Philippe Ariès constituye la historia de las mentalidades.