Puede afirmarse que los estudios académicos sobre las relaciones políticas patrón/cliente en Argentina surgieron emparentados , y por eso mismo indirectamente abordados, a los análisis clásicos sobre el populismo , ubicables en los trabajos en torno a los orígenes de peronismo de Gino Germani.
Es conocido, por otra parte, que el esquema germaniano estaba influido por la denominada versión parsonsiana (por T. Parsons) de los tipos ideales de Max Weber, asimilados a la noción de modelo. El antecedente más ilustre en las ciencias sociales de la región de esta versión de la teoría y la metodología weberiana fueron los escritos de José Medina Echavarría, quien se propuso describir desde esa orientación la estructura social, económica y política de América Latina en términos de los tipos ideales y polares de “Hacienda” y “Empresa”.
La Hacienda era una unidad de producción cuya importancia sociológica residía en ser marco para el surgimiento de los grupos de estatus: terratenientes, artesanos, peones, inquilinos, etc., funcionalmente integrados en la dominación patrimonial. La pauta se expande hacia la política y el estado donde se conjuga con la Iglesia en la articulación del paternalismo. En el opuesto estaba la Empresa: organizada productivamente en términos racionales, bajo condiciones capitalistas de producción.