Parecería más conveniente, al referirse a una supuesta heterogeneidad y confusión en el uso del suelo caracterizado como periurbano -fundada esta premisa en la mera visualización de un resultado-, afirmar que tal comportamiento es la materialización de complejos procesos orientados desde una lógica socioeconómica, particular a cada ins-tancia de dicho proceso. Más especificamente podría afirmarse que una lógica multivariada constituye el estímulo que entreteje la trama de relaciones sociales y estructuración territorial para períodos de tiempo variables. La gran variabilidad temporal y espacial a la que aludimos, traducida en «ondas o momentos» de expansión, consolidación, mutación interna y posibles situaciones de conflicto, constituiría a la luz de los análisis generales y particulares del hecho periurbano, el atributo distintivo respecto a otras formas de organización en el espacio. Trataremos ahora de profundizar en la lógica de producción y mutación de espacios periurbanos, de manera de hacer más evidentes estas afirmaciones.