Partimos de que la “memoria no es el pasado, sino la manera en que los sujetos construyen un sentido del pasado….que se actualiza en su enlace con el presente y también con el futuro deseado en el acto de rememorar…” (Jelin:2017); y del supuesto que la memoria no es unívoca sino, indudablemente, una construcción polifónica que se manifiesta en luchas políticas concebidas en sonidos que suenan más y otros en puja por sonar. Desde aquí pretendemos pensar y reflexionar la guerra y la posguerra de Malvinas a partir de memorias desoídas, memorias que emiten y elaboran un relato “aceptable” y otras que tejen relatos “incorrectos”, con impronta singular que nos permite pensar el conflicto desde nuevas perspectivas. En estas el sujeto intenta sumergirse, incluirse, colarse en el relato colectivamente aceptado de la guerra donde existen fisuras y categorías arquetípicas: héroe, gesta, entrega, patria. Aquí se da espacio a otros interrogantes que proporcionan una mirada diferente sobre el “monstruo” de la guerra entendida como un absurdo.
Los ejes problemáticos de nuestro trabajo nos han permitido poner en cuestión, el concepto socialmente legitimado de guerra como fenómeno acotado a un enfrentamiento de dos ejércitos. Problematizando este concepto de guerra hemos ampliado la mirada, incluyendo a quienes no participaron en forma directa pero vieron modificadas sus vidas a partir de la guerra