Se puede decir que el psicoanálisis nació como una terapia y no abandonó nunca este interés que guió a Freud en la indagación de la etiología y la naturaleza de la enfermedad. En las Conferencias de introducción al psicoanálisis, las palabras de Freud daban cuenta de este interés: "les dije que el psicoanálisis se inició como una terapia, pero no quise recomendarlo al interés de uds. en calidad de tal, sino por su contenido de verdad, por las informaciones que nos brinda sobre lo que toca más de cerca al hombre: su propio ser". Es decir, desde un primer momento el psicoanálisis es presentado por Freud como una terapéutica que se especifica por poner en juego el contenido de verdad en relación al propio ser del hombre.