En nuestra exposición presentamos el análisis del corpus escrito de los alumnos de la EMEM n° 2 del DE 19, situada en la intersección de las calles Barros Pazos y Martínez Castro de Villa Soldati, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. El material fue colectado en el marco de una investigación sobre la escolaridad de alumnos en situación de contacto de lenguas quichua-quechua/español que se llevó a cabo en la institución educativa durante el período comprendido entre los años 2001 y 2006. Observamos que, en los trabajos en que los alumnos volcaban sus impresiones acerca de su barrio, ocurría una peculiar alternancia morfosintáctica de las preposiciones a/en. En efecto, cuando estos morfemas encabezaban complementos locativos en sintagmas verbales con matiz de movimiento (ir, arrastrar, salir) el uso que de ellos hacían los cursantes con competencia lingüística total o parcial con una lengua aborigen revelaba una intención comunicativa vinculada con la aproximación o la distancia a la meta final de la traslación. Entendemos que el alumno en su escritura establece una relación dialógica con el docente en la que pone en evidencia una alternancia sintáctica que requiere de un interlocutor entrenado para realizar un adecuado ejercicio metacognitivo del texto. La evaluación del docente, en estos casos de contacto lingüístico, adquiere un plus de significación que va más allá de la exigencia normativa que se les pide a los estudiantes.