Los significados de los discursos y las prácticas educativas de las organizaciones sociales emergentes se tornan centrales para generar propuestas y alternativas de un nuevo o de nuevos dispositivos pedagógicos a través de la constitución de particulares identidades sociales- distintas, diversas y alternativas al sistema- y de inclusión de nuevos sujetos sociales y educativos, “superadores” de los actores que históricamente el sistema educativo ha tomado en cuenta, e incorporando la participación, la realidad y la voz de los sectores sociales más excluidos y oprimidos. Creemos que posibilita dar una mirada diferente a lo que se considera históricamente por escuela y nos permite a la vez reposicionarla, colocándola en la totalidad de la trama social, de exclusión y de inclusión, del trabajo y del sin-trabajo hoy.