Como parte de la colección "Science ouverte", este libro se destina a "todos los que se interesan por los orígenes del hombre" y brinda "los medios para comprender mejor los debates contemporáneos que se dan en el campo de la paleontología humana y de la prehistoria recurriendo, asimismo, al marco general de la historia de las ciencias de la vida, de la Tierra y del hombre". En tal sentido, esta obra se puede incluir en una doble tradición: por un lado, la inaugurada por Martin J.S. Rudwick (1987) con su ya clásico libro El significado de los fósiles. La conexión, en este caso. estaría dada por la idea de tomar una serie de episodios de la historia de las ciencias, que a la manera de pequeñas historias que se abren y se cierran, sirven asimismo como elementos indiciarlos para entender la consolidación y el abandono de determinadas ideas. Por otro lado, se puede relacionar también con la obra de Stephen Jay Gould (1981), quien toma a la historia de las ciencias para desarmar mitos científicos que actuaron o actúan no sólo en el extramuros sino también dentro de los confines académicos. Ambas tradiciones apuntan a un público amplio e incluyen tanto al lector no educado en la práctica científica como a los científicos mismos: conociendo los lenguajes y los debates desde el seno mismo de las ciencias, adoptan -a través del relato histórico- un modelo de relato corto que ilustra la estrecha relación entre las ideas y la sociedad que las produce y recibe. En el caso del libro que aquí nos ocupa, el recorrido de cada capítulo excede a los episodios que disparan el relato para llegar a una idea vigente en la sociedad contemporánea: de esta manera la función del suceso del pasado como espejo crítico del presente se hace evidente.