Roger Chartier nos ofrece nuevamente un estudio centrado en las prácticas de lectura y escritura, en los modos de producción, apropiación y reconstrucción de significados por parte de lectores de diferentes épocas. Inscribir y borrar: cultura escrita y literatura (siglos XI-XVIII) plantea desde el título la tensión entre escrituras duraderas y efímeras, entre los procedimientos gracias a los cuales las sociedades intentan controlar la proliferación incontenible de los textos y su contrapartida, el temor a la pérdida que origina toda práctica de escritura.