Los conflictos ambientales en zonas urbanas son complejos y de muy diversa índole. Entre ellos, la alteración de los recursos superficiales acuáticos, su contaminación y consecuente degradación puede transformarse en un paisaje aceptado por la comunidad, que desconoce opciones sustentables del medio natural. La experiencia de campo cuando nos enfrentamos al diagnóstico resulta fundamental en el proceso de aprendizaje de las ciencias ambientales, en la búsqueda de indicadores de sustentabilidad y su relación con escenarios de cambio climático.