La tesis analiza un tratado de amor denominado De amore, escrito a finales del siglo XII d.C, por Andrés el Capellán. El tesista interpreta la obra en su contexto de producción filosófico donde el debate entre dialécticos y antidialécticos se encuentra en primer plano y ofrece una lectura lúdica del discurso de Andrés el Capellán en que el amor se convierte en una actividad como la caza o el ajedrez donde determinados órdenes sociales encuentran una huida hacia un mundo lúdico con reglas y jugadores que hacen del arte de argumentar un arte de seducción.