En inglés
The tradition of teaching representation in the faculties of architecture in Argentina, established a division between the universe of artistic drawing and technical-geometric drawing, according to the disciplinary fields‘fragmentation, typical of the thought of the time. The cultural changes that took place in the first half of S XX, both in art and in the scientific field, suggested ruptures in higher education models that were concretized in new plans of studies, where the representational universe was included in the Morphology Area. The present work proposes to make a contribution to the representation teaching from a view situated in a contemporary thinking that assume the form as a cultural product, the project as a mode of operation and to the representation as a cognitive action.
En español
La tradición de la enseñanza de los sistemas de representación en las escuelas pre-existentes a las facultades de arquitectura argentinas, y los primeros planes de estudio de las mismas, establecieron una división entre el universo del dibujo artístico y el del dibujo técnico-geométrico, respondiendo a una fragmentación de los campos disciplinares propia del pensamiento de la época. Ciencia, Arte y Técnica se constituían como campos autónomos y bien definidos con lógicas epistemológicas propias. A partir de los cambios de planes de estudio que tuvieron lugar a mediados del S XX en las facultades de arquitectura argentinas, la enseñanza del universo representacional quedó incluida en las denominadas áreas de comunicación y morfología, que fueron constituyéndose en el Área de Morfología. Hecho que nos permite imaginar recorridos posibles para una nueva relación entre las prácticas del dibujo y la apropiación de la forma. Estos cambios se vieron influenciados por las nuevas corrientes artísticas de las vanguardias, los estudios sobre la percepción de Rudolf Arnheim y los desarrollos de la escuela de la Gestalt cristalizados en los talleres de la Bauhaus. Estas nuevas perspectivas entendieron al dibujo como un acto cognitivo planteando una relación entre forma, representación y proyecto que se mantiene aún hoy vigente.
¿Qué cambios suscitaron los nuevos paradigmas en la enseñanza de los sistemas de representación? ¿Qué implica, en este campo, enseñar asumiendo la complejidad? ¿Podríamos re-ordenar a los sistemas de representación desde las nuevas lógicas? ¿Cómo volvemos a revisar las teorías consolidadas desde los nuevos emergentes que acontecen en los talleres de Morfología donde el lenguaje de exploración de la forma es la representación? Desde hace años venimos explorando una modalidad de taller–acción con consignas poco estructuradas y basadas en una relación de condicionantes y referentes, que dan lugar a una gran diversidad de producción. Asumiendo la complejidad que presentan las etapas evaluatorias hemos podido ajustar la propuesta guiados por los indicios que nos proponen los emergentes, estos son los trabajos y los pensamientos que se escapan de lo previsible. En consonancia con la teoría Heurística, (Breyer, 2003) [1], las consignas proponen la construcción de un problema, más que la resolución de un problema dado. Los ensayos, la prueba y el error, y las nivelaciones periódicas nos han permitido constituir un equipo docente adiestrado en detectar aquellos caminos significativos. La propuesta didáctica y la propuesta teórica se entrelazan en una dinámica vincular donde se dificulta la percepción de sus límites. En ese sentido nuestro aporte se orienta hacia un nuevo paradigma de enseñanza de la representación en el campo del proyecto, entendiéndolo como un medio entre el mundo construido y el mundo imaginado. El presente trabajo entiende a la forma como producto cultural, al proyecto como modo de operación y a la representación como dispositivo cognitivo, términos articulados por un sujeto situado en un pensar contemporáneo.