El acceso a la justicia se ha transformado en un tema de agenda a nivel nacional e internacional. Los conglomerados urbanos, y con ellos sus instituciones judiciales, han ido implementando políticas públicas con el objetivo de dar respuestas a demandas ciudadanas que por diversos motivos quedan por fuera de la capacidad de asesoramiento de las distintas entidades públicas. En este contexto se llevan adelante en nuestro país distintas políticas de descentralización de instancias estatales tales como Oficinas de atención descentralizadas, Unidades móviles de defensa, programas itinerantes vinculados a sectores vulnerables, etc que tienen por finalidad atender en zonas distanciadas de los grandes centros urbanos. Las rutinas, procedimientos, actores y espacios implicados en estos lugares no tradicionales de atención adoptan singularidad y reconvierten las funciones burocrático-administrativas. Este trabajo pretende reflexionar etnográficamente sobre la manera en que se organizan distintas dinámicas de atención descentralizada por parte de una Unidad Funcional de Defensa Civil que, teniendo sede central en una ciudad media de la Provincia de Buenos Aires, lleva adelante sus labores en pueblos geográficamente cercanos (aunque alejados de los palacios de justicia) y que forman parte administrativamente del departamento judicial. El objetivo de esta investigación es indagar en las formas nativas de representar la atención judicial en ciudades de escala pequeñas. Paralelamente buscamos entender de qué manera las prácticas judiciales de atención y los actores involucrados en ellas –profesionales del campo judicial y ciudadanos demandantes- son condicionados por la espacialidad que sustenta tales acciones por fuera de los grandes palacios de justicia.