Este estudio pretende atender a las singularidades y regularidades que presentan un conjunto de procesos judiciales por crímenes de violencia física ocurridos en espacios domésticos, y que fueron denunciados en Buenos Aires durante la década de 1830. Las escenas de agresividad entre madres, padres, hijos, esposos y mancebos son los disparadores para analizar la manera en que la administración de justicia dio tratamiento a estos delitos cometidos en el espacio privado.
Se trata de causas criminales donde víctima y victimario mantenían vínculos de parentesco estrecho, de filiación y hasta lazos afectivos íntimos. Ante los hechos consumados, los círculos de sociabilidad, los auxiliares de justicia y los funcionarios desplegaron una serie de estrategias orientadas a consensuar los castigos adecuados para los perpetradores. Examinar las discursividades emergentes y problematizar las maneras en que construyeron los relatos de la violencia interpersonal privada es el principal objeto de esta indagación.
Desde lo metodológico, la perspectiva utilizada para el abordaje de las fuentes, pretende interrogar los expedientes de justicia atendiendo a las múltiples voces e intervenciones que participan en el juego de tensiones, rescatando su densidad y las subjetividades de los actores, e intentando ofrecer una alternativa a la mirada fragmentaria y de retazos que ha predominado en el análisis historiográfico.