La leche puede ser alterada por la presencia de bacterios, y estas alteraciones se pueden dividir en dos grupos: 1er grupo: alteraciones debidas á microbios patógenos específicos, como ser el bacillus de Kock, el de Davaine, etc. 2º grupo: alteraciones debidas á microbios casi esclusivamente saprofitos, que consisten en las diferentes fermentaciones lácticas.