El problema de la higienización de la leche destinada al consumo público, es uno de los más arduos que se haya presentado al higienista moderno, particularmente cuando trata de la provisión de los grandes centros poblados que hacen un inmenso consumo de este alimento precioso e irremplazable, que puede, sin embargo, ser la causa de males sumamente graves, hasta llegar a propagar terribles epidemias, si las autoridades y la población misma no proveen a una cuidadosa vigilancia para asegurar la buena calidad y las condiciones higiénicas indispensables de este delicado artículo de consumo.