Desde ya hace algunos años se plantea en torno a la formación universitaria que no debe solo circunscribirse a la formación científico-técnica de una profesión específica sino que, conforme al contexto actual, requiere de una formación integral. En este sentido las Universidades deben estar comprometidas con las problemáticas y necesidades sociales.
El trabajo de extensión nos ofrece dentro de esta mirada de formación integral, forjar ciudadanos transformadores, democráticos, comprometidos socialmente, defensores de la libertad, la justicia social, los derechos de las personas, la inclusión, la igualdad de oportunidades. De modo que el presente tiene como finalidad poner en conocimiento las experiencias significativas que representan la ejecución de Proyectos de Extensión, en el caso de nuestro grupo de trabajo se circunscribe a la región del NEA de la República Argentina. La articulación entre los espacios académicos y la comunidad nos permite espacios de aprendizajes valiosos por parte de todos los actores sociales involucrados. Nuestro grupo extensionista desde hace muchos años viene ejecutando proyectos en diversas zonas del Nea que nos ha permitido observar las relaciones que trascienden el aula y se constituyen en un tipo de un aprendizaje situado, basado en la experiencia, en la emoción y afectividad de sus protagonistas.