La adhesión de un sellador endodóntico a las paredes del conducto radicular es una de las propiedades que un material debe tener para promover un sellado hermético como sea posible del conducto radicular. La literatura de endodoncia siempre se ha preocupado de destacar la necesidad de llenar el conducto de manera hermética. Leonardo y Leal (1991) afirmó que un tratamiento de conducto, significa llenarlo en toda su extensión con un material inerte y antiséptico, para conseguir el cierre hermético del espacio lo mejor posible, a fin de intervenir, y si es posible estimular el proceso de reparación apical y periapical, lo que debería ocurrir después de un tratamiento de endodoncia radical. El objetivo de llenar un canal de la raíz es la de mantener los tejidos periapicales sanos.