La tesis negativa de la utilidad de los estudios clásicos griego- latinos en la organización de los programas escolares de la Nación, tesis sostenida entre nosotros (caso más único que raro) por un literato y poeta de profesión, no destruye el hecho, acertado y documentado por los investigadores de la formación histórica de la Nación Argentina, de que nuestras altas esferas culturales participaron activamente, en la época colonial, de ese movimiento de ideas, afectos y aspiraciones que en los distintos y más variados momentos de la evolución intelectual de la humanidad, provocaron siempre los grandes escritores antiguos.