El “Taller de Historia de la Arquitectura” a cargo de la Dra. A. Brarda de la Facultad de Arquitectura, Planeamiento y Diseño de la UNR, del cual formamos parte, está organizado para el dictado de tres asignaturas, Historia de la Arquitectura I, II, III, más dos materias optativas, estructurando con ello una secuencia de aprendizajes conceptuales, procedimentales, de investigación y producción.
Desde una perspectiva pedagógica, el trabajo en taller es comprendido como un particular sistema de enseñanza - aprendizaje, un lugar de elaboración, y transformación de conocimientos, como una forma de” aprender haciendo” en particular en este taller, desde la observación histórica de los objetos de estudios del ámbito local Rosario a lo global.
Por ello, dentro de la estructura del trabajo en este taller hemos estado desarrollando espacios de “micro aprendizajes”, en tanto estrategia educativa que se caracteriza por la brevedad de sus lecciones y sus unidades de aprendizaje.
Para realizar esta experiencia se parte de entender que la “Historia de la Arquitectura” no conforma un corpus de cocimientos cerrados, que los alumnos necesariamente deben reproducir. Y además que, los contenidos específicos pueden ir variando año a año en relación con los intereses grupales, dado que creemos que éste es el lugar donde se debe potenciar la reflexión, el juicio crítico, así como la capacidad de generar nuevas hipótesis interpretativas.
La experiencia de los micro-espacios (visitas de obras, comic, viajes, juegos, utilización de celulares, tablets, etc., cuestionarios en línea, safaris fotográficos, confección de videos, etc.) proporcionan unos conocimientos y conjuntos de habilidades sin agobiar al alumno y de una manera más dinámica que la tradicional.
De esta forma se producen aprendizajes con una alta variedad de contenidos, que se centran en temas puntales, utilizando muchas veces herramientas tecnológicas que permiten al alumno acceder con más facilidad en momentos y condiciones del día específicos como, por ejemplo, durante momentos de descanso o mientras se realiza un viaje o bien fuera del dictado formal de las asignaturas.
Estas prácticas se comenzaron a diseñar a partir de reconocer que el conocimiento hoy es ubicuo y que los aprendizajes son completamente distintos a aquellos de hace poco tiempo atrás. Ya que la academia ha dejado de ser la única detentadora del saber y donde las lecciones extensas y unilaterales ya no son hegemónicas para la transmisión de conocimientos.
Así los “microlearning”, o procesos de aprendizaje basados en formatos más pequeños y segmentados, se nos presentan como nuevos desafíos tanto para alumnos como para los docentes en las aulas del siglo XXI.