Uno de los pilares fundamentales en la enseñanza anatómica es el preparado cadavérico. A lo largo de cientos de años se han desarrollado distintas maneras de realizar disecciones y se ha intentado reglar estos métodos, de modo que exista una cierta unanimidad a la hora de comenzar a preparar una pieza para determinados temas de estudio. Los estudiantes de la materia son los principales beneficiados ante el material cadavérico bien presentado pero los ayudantes alumnos y diplomados padecen todo tipo de inquietudes al intentar llevar a cabo su disección. Por ese motivo históricamente han existido escuelas de disección en las diferentes facultades de ciencias médicas del mundo.