En el año 2017 se creó el Programa de Políticas de Género de la universidad y tiene dos grandes líneas a su cargo. Una, la de aplicación de los protocolos para abordar y tramitar denuncias de violencia por motivos de género. La otra, la de formación. El Programa se encarga de la sistematización general de lo que se lleva adelante en la universidad, pero desarrolló además ciclos específicos y orientados de formación en la materia.
Es sobre esta propuesta que nos queremos detener, para considerar las distintas dimensiones, temas y abordajes que implica, cuyo sentido está centrado en ir más allá de la codificación de la violencia, para considerar la diversidad corporal, identitaria, sexual, y, a la vez, los anudamientos entre las cuestiones de género con el trabajo, la economía, la desigualdad, la racialización y el deseo.