La problemática de la enseñanza y el aprendizaje ocupa un lugar trascendental en los procesos de formación de profesionales de las ciencias jurídicas. En virtud de ello, deviene imperiosa la necesidad de ubicar las prácticas docentes en la intersección entre el conocimiento disciplinar y el conocimiento socialmente significativo.
En la presente ponencia se tratará de caracterizar la función del tercero mediador y/o facilitador de esos conocimientos, y la urgente necesidad de abandonar el rol de mero transmisores de saberes.