Para el Segundo Encuentro Nacional de DDHH y Educación Superior nos interesa relatar la experiencia de constitución del área de vinculación con cárceles de la Facultad de Trabajo Social perteneciente a la Secretaría de Derechos Humanos y Géneros, entendiendo que la misma es expresión del proceso de institucionalización de los derechos humanos en las políticas universitarias.
Es importante partir de que en los términos contemporáneos la cárcel se configura como una política que pretende dar respuesta a la necesidad de generar control, disciplinamiento y corrección de quienes alteren el orden social. Las ciencias positivistas en este contexto introducen cambios en la forma de entender la función del encierro y la cárcel dentro de la sociedad. Aparecen nuevos actores en la justicia penal moderna: psicologxs, medicxs, psiquiatras y trabajadorxs sociales que se insertan en el sistema penal basándose en la identificación, control y tratamiento de un sector de la población, es de esta manera, que comienza a configurarse la cárcel como parte de los espacios socio-ocupacionales donde lxs trabajadorxs sociales podemos desarrollar nuestras competencias laborales.