Este trabajo analizará el audiovisual llamado A trazo muerto desde el análisis del contenido como desde un estudio formal de la discursividad del lenguaje audiovisual para desentramar los repartos que se establecen en cuanto a identidad – representación y el ejercicio de la profesión en el arte. Contemplando un reparto injusto que sostiene las tensiones generadas entre centro y periferia. Así, reflexionar acerca del rol del artista, sus ambiciones, necesidades y su función en la sociedad se vuelven necesarias para dar cuenta de las diferencias políticas, sociales, económicas y culturales entre estos dos polos y cómo ello influye tanto en la estética de las producciones artísticas como en los modos de producción.