Podemos decir que lo proyectado se llevó adelante en forma satisfactoria. El modelo de intervención y las estrategias de difusión y desarrollo utilizadas fueron productivos. La intención de transmitir el espíritu del juego fue cumplida. El interés de los alumnos, de los docentes y de la comunidad de la Escuela EMETA por el rugby se pudo apreciar en todo momento del proyecto. El rugby como contenido educativo fue insertado en la escuela. Es de esperar que su práctica y difusión continúe en el tiempo a través de la curricula de educación física. Desde el punto de vista de la Cátedra fue un gran aprendizaje puesto que pudimos constatar que el rugby puede enseñarse en las escuelas públicas con características totalmente diferentes a lo que se podría presuponer para la enseñanza de este deporte. Nos dio la oportunidad de acrecentar nuestra curricula con propuestas pedagógicas de gran impacto social.