En el presente trabajo se busca repensar, a partir de entrevistas a miembros del Colectivo Trans, los fenómenos sociales que ponen en crisis: i. la efectividad de la normativa formal (partiendo de la perspectiva o enfoque de género sintetizado en el ítem anterior) y ii. el grado de racionalidad de la normativa en cuanto al hecho de alcanzar la finalidad prevista en una regla formal sancionada y promulgada en una sociedad (Gerlero; 2022:32) La ley 26.743 de Identidad de Género permite modificar los datos personales identitarios en el Registro, esto incluye el cambiar el nombre, la imagen y el sexo registrado; acceder a tratamientos hormonales e intervenciones quirúrgicas totales o parciales para adecuar tu cuerpo a la identidad elegida y el derecho al libre desarrollo de su persona conforme a su identidad de género.
Llevado a la práctica lo expuesto, si la identidad de género autopercibida no coincide con la asignada al momento de nacer, es posible solicitar la rectificación registral del sexo, nombre/s de pila e imagen en la partida de nacimiento y obtener un nuevo DNI, todo por vía administrativa, es así que la perspectiva o enfoque de género, al facilitar poner en crisis el binarismo, termina siendo fundamental para sostener la investigación, el análisis y la sugerencias de cambios formales y en las prácticas de los operadores del derecho para asegurar visibilidad, inclusión y empoderamiento debido a las múltiples resistencias al cambio.