Las cavidades orbitarias se encuentran situadas simétricamente a ambos lados de la nariz por debajo del nivel anterior de la base del cráneo. Y está ubicada de forma oblicua respecto al plano coronal del cráneo. Su forma es piramidal, su vértice está representado por el agujero óptico y su base por el reborde orbitario. Es importante considerar la relación que existe entre el eje orbital y el eje ocular, puesto que forman entre sí un ángulo de 23° y es lo que dará fundamento a las posiciones diagnosticas para la evaluación de los músculos extraoculares.
El globo ocular es un órgano fundamental de la visión, de forma casi esférica, con un largo anteroposterior de aproximadamente 24 mm y una consistencia muy firme debido a la tensión de los líquidos intraoculares. Si bien se encuentra situado en la cavidad orbitaria, no está en contacto con sus paredes y ocupa solo su mitad anterior, a la cual desborda levemente hacia adelante.
Se encuentra separado de la mitad posterior que contiene el complejo vasculonervioso, muscular y adiposo, por una membrana fibrosa llamada cápsula de Tenon.