En el presente trabajo se trata de volver a analizar las características de la “Psicología del Sentido Común” como “Teoría de la Teoría”, a partir de los conocimientos provenientes de la “Psicología del Desarrollo”. Sucede que de manera habitual nos entendemos a nosotros mismos y a los demás como sujetos con una vida mental: con sensaciones, sentimientos, emociones, deseos, creencias, recuerdos, ilusiones, pensamientos, rasgos de carácter, aptitudes, voliciones; que atribuimos y con las que explicamos y predecimos las manifestaciones conductuales. Se parte del hecho evidente, de que nadie necesita ser un psicólogo profesional para poder preguntarse por lo que hacen las personas y por cómo encajan con lo que nosotros hacemos, apelando para ello a pensamientos, deseos y emociones.