El enfoque propuesto en este trabajo, siguiendo a Kleinman (1991) y Ghaemi (2003), plantea integrar los aspectos de los distintos factores implicados en las enfermedades mentales, considerando su interacción, y eliminando un enfoque dogmático y a priori de la supuesta predominancia de uno por sobre el otro como factores determinantes. En otras palabras, se plantea la necesidad de reconocer para cada problemática en particular los métodos que posean más relevancia para su investigación y elucidación, ya sea que estén más enfocados desde lo biológico, psicológico, cultural y/o social. Esta visión implica una perspectiva `pluralista´, abordando desde la mayor complejidad posible el fenómeno en estudio, sin dejar fuera aspectos importantes, encontrándose inspirada en la obra de Jaspers.