En esta tesis proponemos un rastreo de las representaciones ficcionales de la cautiva en la literatura argentina, desde el siglo XIX hasta el XXI, con el fin de explorar sus características, sus variantes y sus correspondientes marcos socio-políticos de emergencia. Consideramos que la cautiva mítica que se configura en el siglo XIX no solo es un personaje cuya significación en la literatura argentina aún no se ha explorado en profundidad, sino que sus rasgos distintivos han dejado huella en figuras femeninas de destacada presencia en las ficciones de los siglos XX y XXI: las presas políticas y las víctimas de trata. Nos interesa, en primer lugar, observar las características y el marco enunciativo de forjamiento y surgimiento de la cautiva, considerándola figura susceptible de arrojar sentidos imprescindibles para los estudios de la literatura y de la cultura argentina. El punto de partida será el texto La Argentina (1612), de Ruy Díaz de Guzmán, que se edita por primera vez en 1836, fecha que nos permite enmarcarlo en el siglo XIX. Luego exploraremos otros textos del siglo XIX que reescriben el mito de origen, para ponerlos en paralelo con producciones del siglo XX y XXI que resignifican el cautiverio femenino y con algunos textos que, si bien no evidencian una reescritura del relato de la cautiva originaria, presentan personajes femeninos que padecen otras formas de cautiverio. En efecto, creemos que en las representaciones literarias de la presa política de la última dictadura militar y en las representaciones literarias de la víctima de trata de personas podemos hallar huellas semánticas de la cautiva mítica. De esta manera, nos interesa indagar en los alcances de una posible continuidad entre textos que se refieren al cautiverio del cuerpo femenino durante la colonia y en el siglo XIX, y los cuerpos cautivos que aparecen ficcionalizados desde la segunda mitad del siglo XX hasta el presente. Estos últimos arrastrarían, resignificándola, la memoria semántica y cultural de las cautivas coloniales y decimonónicas, dando cuenta de una serie discursiva que desplegaría múltiples formas de cautiverio femenino a través de la historia. En síntesis, creemos que en la figura de la cautiva puede existir una clave inexplorada que nos permitiría comprender, por un lado, algunos aspectos fundamentales de la literatura argentina, vinculados no solo con los textos coloniales decimonónicos fundadores de la nación sino también con las formas de ficcionalización más recientes. Por otro lado, consideramos que estudiar el cautiverio femenino en sus modalidades varias excede los intereses puramente literarios y permite acceder al conocimiento y a la reflexión sobre aspectos claves de la historia y de la cultura nacional que involucran al sujeto femenino y dan cuenta de las múltiples formas de sujeción y control que se mantienen hasta el presente.