El proyecto de investigación "Tecnopoéticas queer, estrategias contra-sexuales y subjetividades glitch en la obra de Victoria Papagni y Luis Enrique Zela-Koort" plantea analizar un corpus de obras desarrolladas por estxs artistas latinoamericanxs, considerando las operaciones de apropiación táctica de las tecnopoéticas queer, las interrupciones críticas y su contribución en la construcción de subjetividades glitch. Las obras de Papagni y Zela-Koort utilizan un amplio espectro de técnicas, tales como: el modelado 3D, la robótica, la inteligencia artificial, la videoperformance, el textil, la pintura, entre otras. Estas prácticas son aproximaciones interdisciplinarias y experimentales ubicadas en la intersección del arte, el diseño y la tecnología. Uno de los objetivos específicos del plan de trabajo es analizar de qué manera los usos de los medios infotecnológicos que realizan lxs artistas pueden interpretarse como apropiaciones contraproductivas. En este sentido, la comprensión de las tecnopoéticas como contratecnologías de género propone realizar un estudio de estas producciones artísticas contemplando la conceptualización del hacer, dentro de la propia dimensión de lo técnico-artístico y sus aspectos socio-técnicos situados. Lo cual permite interpretar las relaciones, quiebres y tensiones en el entramado arte-ciencia-política; un análisis mediado por una perspectiva transversal tecnotransfeminista que problematiza esas conceptualizaciones que han sido concebidas desde la heteronormatividad, reglamentando los usos generizados y ajustándolos dentro de los parámetros de eficacia y transparencia que ha impuesto la matriz de gubernamentabilidad neoliberal.En este marco las obras de Papagni y Zela-Koort son consideradas dispositivos complejos en dónde las imágenes intentan ensayar estrategias de contrasexualidad. La ciencia ficción, la fantasía, el animé, el pop, son temas y gestos que se despliegan en estas obras y disputan críticamente el sentido de determinadas imágenes de la política. Este trabajo entre-imágenes actúa de forma crítica sobre la biopolítica disciplinaria, produciendo un potencial diferencial performativo. Son desviaciones, torceduras, interrogantes en la conformación de una imaginación política refractaria que puede contribuir a la elaboración de nuevos horizontes sensibles.