Actualmente las parcelas de la región enfrentan problemas de naturaleza técnica como de gestión administrativa relacionada con el riego de los cultivos. Una planificación y programación ordenada y ajustada de los riegos es un instrumento fundamental para el uso eficiente del agua, y se orienta detrás de la idea de suministrar en el momento oportuno la cantidad necesaria de agua al cultivo, para la obtención de rendimientos crecientes y estables.
La programación del riego puede lograrse por distintos métodos basados en la medición o estimación de variables ambientales (temperatura, presión, radiación solar, evapotranspiración); monitoreo en el crecimiento y desarrollo del cultivo o fitomonitoreo (tamaño del fruto, tamaño del tallo, flujo de savia, índice de estrés hídrico), y / o la medición de variables en el suelo (temperatura, humedad, conductividad, constante dieléctrica).
El procesamiento de variables obtenidas de diferentes tipos de sensores aportará mayor cantidad de información a la ya disponible, permitiendo detectar con mejor precisión la necesidad de agua y fertilizantes, como así también la detección de enfermedades en las plantas de olivo, reduciendo la incertidumbre en la toma de decisiones relacionada con la planificación del riego y la fertización. Es necesario, pues, contar con una metodología sencilla y económica que brinde soluciones prácticas a los agrónomos.
Se presenta en este trabajo una línea de investigación sobre el desarrollo de un método que permita identificar con mayor precisión la necesidad hídrica de la planta a partir del análisis de las variables capturadas por los diferentes sensores. Esta línea de trabajo se lleva a cabo dentro del proyecto “Pronósticos de Riego Presurizado para Cultivo de Olivo en Regiones Áridas”, aprobado en el año 2009, por la Subsecretaria de Ciencia y Técnica, convocatoria de financiamiento para estímulo y desarrollo de la investigación científica y tecnológica (Ficyt–UNDEC).