El trabajo presenta un modelo evolutivo para ambientes estáticos con el objetivo de estudiar el comportamiento de ciertos operadores sujetos a una representación y recombinación especial para permitir el movimiento, de una población en evolución, desde un óptimo local hacia uno global. El modelo trabaja a nivel fenotípico y los fenes son números reales. El cromosoma de cada individuo está compuesto por fenes activos (influyen en el fitness) y fenes redundantes (no influyen en el fitness). El rol de los fenes varía durante la evolución a causa de la aplicación de operadores específicos. El modelo implementa los operadores genéticos básicos: recombinación y mutación.
Pero también implementa otros operadores adicionales: crisis, recrudescencia, transposición y transición [3]. Resultados preliminares de las simulaciones del modelo se describen y discuten.