La escuela históricamente ha ofrecido ciertas resistencias al ingreso de las tecnologías creándose así falsos enfrentamientos entre quienes las visualizan como innovadoras y motorizadoras de cambios y quienes las atacan en nombre de que atentan contra principios esenciales de la educación.
Este trabajo propone integrar el potencial que los/as niños/as y jóvenes adquieren en el manejo de redes con uso de TICs fuera de la escuela al trabajo del aula, como optimizadores de la enseñanza y del aprendizaje.
Se recupera el trabajo en colaboración como marco de una experiencia positiva encarada en el Proyecto Aulas en Red de la Ciudad de Buenos Aires.