No es casual que una de las primeras experiencias editoriales argentinas desplegada en la ciudad de Buenos Aires, lleve por título “Biblioteca Popular”. La trayectoria de su mentor, Bartolomé Victory y Suárez (1833-1897), parece graficar este movimiento: este hijo de la cultura obrera catalana de la década de 1840-50 –era tipógrafo, miembro de esa “aristocracia obrera” del siglo XIX– se exilia en Buenos Aires en 1857 vinculándose al incipiente movimiento mutualista y asociacionista local (la Sociedad Tipográfica Bonaerense) al mismo tiempo que conquista un lugar como editor, periodista e incluso administrador dentro de la élite letrada porteña. Producto de la cultura popular, encuentra un lugar dentro de la élite, y desde ella lanza su proyecto editorial, que no duda en bautizar “Biblioteca Popular”.