El Grupo Productivo es un nucleamiento empresarial surgido en septiembre de 1999 que en un principio estuvo conformado por la Unión Industrial Argentina (UIA), la Cámara Argentina de la Construcción (CAC) y las Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), con el objetivo declarado de presionar por medidas político-económicas a favor de la producción, la reactivación económica y en contra del “proyecto financiero”. El Grupo Productivo reunió a los grupos económicos locales “perdedores” en la profundización del proyecto financiero neoliberal. Si bien eran parte de la “comunidad de negocios” de los años 90’, su debilidad económica con respecto a otras fracciones de capital en cuanto a su escala y composición orgánica, así como por su dedicación a la producción de bienes transables que en un contexto de sobrevaluación del peso y apertura económica, los hacía muy poco competitivos, dejando a estas fracciones de capital en una situación subordinada y en progresiva pérdida de terreno en la estructura económica. Por otra parte, dichas fracciones compartían las dificultades financieras en un momento de crisis, lo cual los enfrentaban a los bancos, particularmente a los extranjeros. Esta situación provocó el quebrantamiento del Grupo de los Ocho (que reunía a los tres sectores del nuevo grupo más la Bolsa, el comercio y los bancos).