La literatura que versa sobre la inserción laboral de migrantes limítrofes en el mercado de trabajo argentino es basta y variada. Entre ella podemos destacar aproximaciones desde enfoques metodológicos así como teóricos muy diversos, que nos presentan una imagen compleja de la situación que viven bolivianos/as, paraguayos/as, chilenos/as y peruanos/as en nuestro país (Maguid y Bruno, 2010; Bruno, 2008, Maurizio, 2006, entre otros/as). Sin embargo esos análisis han tendido a centrarse en los/las trabajadores/as para explicar las posibilidades y limitaciones de su particular situación en la participación en las relaciones laborales, dejando de lado la mayoría de las veces cómo esas modalidades de inserción son propiciadas también por los empleadores/as argentinos/as (podemos mencionar sin embargo, algunos desarrollados para el caso español: Collectivo IOÉ, 20003; Parella Rubio, 2004). Es por eso que este trabajo se va a centrar en las representaciones que sostienen esos/as empleadores/as al momento de la contratación y la gestión de esa mano de obra.