Iniciada la modernidad, la filosofía cartesiana plantea la subordinación del cuerpo en tanto naturaleza interna y externa en pos de la emergencia de un si mismo racional. La Educación Física (en adelante, EF) como disciplina nacida aquí, toma estos discursos para la legitimación de prácticas corporales de corte racional excluyendo otras ligadas al cuerpo como expresión. Con esto, se reduce al sujeto en un determinado círculo de posibilidades corporales.
Se plantearán tres argumentos respecto de esta cuestión. El primero hará mención al concepto de cuerpo-sujeto en su vinculación con el lenguaje corporal y la comunicación. El segundo hará mención al cuerpo como sujeto Y objeto en su vinculación con la técnica como arte y la re-creación. En el tercero se citará un ejemplo práctico llevado adelante con un grupo de adultos de la cultura hawaiana.
Para concluir, se hará mención al contexto del siglo XX y la reversión de las dicotomías hacia la esfera del consumo y la cultura hegemónica normal.