“So a lot of the personalities that came out were just fragment of myself. Fragments of things I used to be, wanted to be, never could be” (Joost, H. y Schulman A., 2010), dice Angela. Tiene los ojos húmedos con lágrimas, se acomoda en forma nerviosa el pelo. No mira directamente a la cámara. Faltan aproximadamente diez minutos para que la película termine, por lo que este no es sólo un momento emotivo, sino que dentro de la narrativa del film cobra una cualidad redentora. La confesión a voz quebrada pretende dejar en claro de que estamos viendo a la verdadera Angela, aunque no sería la primera vez que veamos a la protagonista mintiendo en cámara. Quizás sea todo producto de la pericia del editor ¿Qué elegimos creer? Nada es lo parece en Catfish, el documental dirigido por Henry Joost y Ariel Schulman que cobró relevancia a partir de su proyección en el Festival de Cine de Sundance del 2010.