Resulta complejo dar cuenta brevemente del cúmulo de vivencias del exilio chileno y diferentes autore/as han abordado esta problemática desde distintas ópticas aportándonos numerosos elementos de reflexión. A partir de septiembre de 1973 y debido a la persecución política desatada por los militares, miles de hombres y mujeres se vieron en la obligación de salir de su país. Hasta la fecha, sigue siendo aún extremadamente engorroso establecer cifras exactas del éxodo provocado por la dictadura chilena puesto que los únicos instrumentos de medición existentes fueron los registros de los países de acogida, los cuales no nos permiten determinar precisamente la dimensión y proporción de este exilio. Según los criterios de las Naciones Unidas, alrededor de 250.000 personas fueron calificadas de refugiadas políticas y diferentes fuentes se refieren a un millón de chileno/as viviendo fuera de Chile, los cuales abandonaron el país durante este periodo.