Este nuevo impuesto es materia de aguda controversia. Desde nuestro equidistante nivel, estamos en condiciones de emitir un juicio imparcial a fin de que, en la medida de lo posible, se mejore lo bueno o se enmiende lo errado. Nos encontramos, frente a una emergencia y estoy seguro de que todos los argentinos estamos dispuestos a hacer el esfuerzo necesario para superarla. Por este impuesto se crea un gravamen del 1,6 % a las tierras declaradas aptas, según la define su art. 39 con las excepciones que se establecen en los arts. 39 y 59.