Los profesionales de la enseñanza de natación compartimos el espacio de trabajo con los guardavidas, quienes son los encargados de velar por la seguridad de los usuarios del natatorio. Sin embargo, también los profesores y aún los alumnos debemos conocer, respetar y difundir las normas de seguridad en la piscina. "La seguridad en el agua es una responsabilidad que nos incumbe a todos". Nociones básicas de seguridad y salvamento serán herramientas de trabajo para el docente y contenidos a enseñar dentro del programa de escuela de natación. La seguridad está dada por la protección; una persona que se siente protegida va a estar seguro en su andar por la vida; un niño que se siente seguro en el agua va a estar protegido cuando esté inmerso en ella. En nuestra escuela de natación, diseñamos un programa de enseñanza para que el alumno domine el aproximarse a un borde y sostenerse del mismo, el moverse libremente ante la mirada de un adulto en el agua, el salir de la piscina por sus propios medios, el rolar longitudinalmente y dejar las vías aéreas libres de agua en flotación dorsal y el recuperar la posición vertical desde la flotación horizontal. Estos contenidos en conjunto con la ambientación al medio, la respiración, la flotación y la propulsión logran un mejor desenvolvimiento, una mayor confianza, una mayor autoestima y una mayor seguridad, que incluso le permiten al alumno, asistir a otra persona que requiera ayuda en el medio acuático.