En el ensayo titulado “Sobre la historia del concepto filosófico de «Antropología» desde finales del siglo XVIII” Oddo Marquard señala que la antropología filosófica es un producto específicamente moderno. Hablando con propiedad sólo cabe denominar antropológicas a las teorías filosóficas del hombre que pretenden dar cuenta de la totalidad del ser humano en la realidad de su mundo vital a partir de una referencia directa a su naturaleza.
Conforme al esquema de Marquard, la génesis del discurso antropológico debe datarse en el último cuarto del siglo XVIII. Durante este período, la filosofía de la historia entró en crisis debido a la constatación fáctica de que la trayectoria concreta de la realidad desmentía las expectativas de una pronta realización de la razón en el mundo. En respuesta a esta desilusión, el pensamiento romántico se refugió en una concepción vitalista de la naturaleza que ofrecía nuevas coordenadas teóricas para pensar al hombre y su destino mundano.
(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)