La Expresión Corporal promueve la capacidad de desarrollar el estar presentes, el tomar conciencia de nuestro cuerpo en sus múltiples dimensiones, su relación con los otros y el entorno. La conciencia es un fenómeno de lo viviente, construye un modo de pensar, conocer y aprender que se inicia en la sensibilidad. El Método Sensoperceptivo, creado por Patricia Stokoe, propone abrirse a la experiencia del cuerpo, del movimiento y de la danza. Se inicia en ‘el escuchar’ -afinando la sensibilidad- para desplegarse en la improvisación como técnica y el movimiento como lenguaje. Es la experiencia del cuerpo como metáfora, como individuo en su enteridad, no como artefacto mecánico. Busca la coherencia entre el sentir, el pensar y el hacer que estimulen en el ser humano el derecho a desarrollar su propio lenguaje del movimiento, preguntándose siempre acerca de la complejidad de la expresividad humana. Reconstruir la historia de la EC y sus contenidos, es también preguntarnos acerca de su origen (o diversos y paralelos orígenes), sus fuentes comunes o diversas, la interrelación con otras disciplinas, su inserción en la Educación en general y la Educación por el Arte en particular, el rol del cuerpo en juego en la escuela, sus alcances éticos y poéticos, inserta en los particulares momentos históricos nacionales y mundiales que la han ido enmarcando y hacia los cuales ha ejercido su particular aporte creativo y transformador. Reflexión que nos permitirá actualizar aquellos temas esenciales que hacen a su identidad y vigencia para pincelar posibles encuentros con la Educación Física.