La propuesta estética de Goodman se compromete, aunque de modo tangencial, con las dificultades propias de todo desarrollo del caso. En ella se atiende, entre otras cosas, a los problemas derivados de la dificultad en torno a la postulación de una definición satisfactoria del hecho artístico.
Tal dificultad ha sido experimentada por los acercamientos teóricos de todos los tiempos. No obstante, la práctica artística contemporánea vinculada a la producción de obras que desafían constantemente la definición del arte, ha introducido nuevos enfoques y perspectivas de análisis.
Una serie de cambios en los modos en que tradicionalmente se había entendido el ejercicio del arte han promovido fuertes tensiones y desplazamientos en la teoría acerca de él.
(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)