El territorio no se descubre, ni se representa de un modo unívoco; se inventa y recrea desde cada nueva lectura. El concepto de territorio sobre el que se apoya la presente línea de investigación está ligado esencialmente a un acto operativo. La mirada del arquitecto-investigador sobre su objeto de estudio, el acto de recavar y “representar” determinada información, pensar el territorio, implica en sí un acto de territorialización.
Este acto operativo tiene como esencia la acción de medir, añadir, fijar información, para lo que necesariamente se debe contar con algún instrumento que va a permitir una abstracción o un determinado modo figurativo. El instrumento de medición utilizado condiciona el territorio.