En el año 2005 tuve un ofrecimiento laboral en una Clínica Psiquiátrica, que acepté sin tener ningún tipo de formación o preparación específica. Respaldada en mi experiencia docente con adultos mayores, obtuve la confianza para formar parte del equipo de esta nueva institución. De alli en más comencé a trabajar en numerosos establecimientos de salud mental y a desarrollar herramientas pedagógicas y humanas que me permitieron crecer profesionalmente.
Deseo compartir y aportar una mirada hacia una de las minorías aún hoy más olvidadas de la sociedad moderna: los "locos" o enfermos mentales, invitándolos a construir alternativas de abordaje en la atención interdisciplinaria y tratamiento de las personas con padecimiento mental y a trabajar en el proceso de su integración social. Los convoco a redimensionar nuestra labor, a implicarnos en estos espacios y a enfrentar prejuicios y temores acerca de la enfermedad mental.